miércoles, 4 de abril de 2012

Capítulo V

A la mañana siguiente, me sentía enérgica. Me daba igual estar en un lugar donde a penas me conocían y donde no tenia amigos, me daba igual tener que enfrentarme a una escuela llena de prepotentes y materialistas, me daba igual absolutamente todo, solo quería llegar al instituto ya, y ni siquiera sabia por qué, tal vez es que las cosas estaban poniéndose interesantes con John, por que a pesar de la promesa que me hice cada día tenia mas ganas de verlo, o tal vez era que las cosas no parecían tan pesimistas después de dejar en ridículo a Barbie alpha. El caso es que quería llegar ya y seguir con lo que fuera que estuviese pasando.
Me levante pegando un bote de la cama, puse Crush Crush Crush de Paramore mientras llevaba a cabo mi rutina diaria. Ducha, secador, ropa, desayuno. Me movía rápido debido al entusiasmo, así que acabe bastante antes de lo normal, de todas formas estar en casa sin hacer nada me agobiaba así que me colgué la mochila al hombro y me dirigí hacia mi coche. Lo puse en marcha y me dirigí hacía el instituto dando golpecitos al volante al son de la música que salía de la radio. Era una canción bastante tranquila, para nada mi estilo, pero aun así me gustaba. Tengo que enterarme de como se llama la cantante. Seguí con mi buen humor hasta llegar al aparcamiento, casi todos los sitios estaban vacíos, así que pude encontrar una buena plaza cerca del centro. Salí del coche casi dando brincos y me metí al instituto, por fin tendría un poco de tiempo para explorar y tal... Empecé por asomarme por las ventanillas de las aulas del primer piso, que eran a las que se iba solo en algunas clases, la de arte, la de música, el laboratorio... Me dieron ganas de entrar a algunas mas de una vez. Seguí por el pasillo hasta encontrarme con el tablón de anuncios. Empecé a leer los anuncios que la gente o grupos había ido colgando. Había algunos interesantes y en el preciso momento en el que me estaba fijando en uno en concreto, en el de música, noté un ligero toque en la espalda. Me giré y me encontré con una pareja, una chica y un chico, con cara simpática, pero con la cual me miraban de arriba a abajo. La chica tenía un pelo rojizo muy brillante y ojos azules, llevaba vestida una camiseta de ACDC y una falda corta a cuadros, leggins rotos y botas pesadas. El chico era alto moreno y guapo, y iba con camisa blanca y pantalones negros. Vi como la chica le pegaba un codazo a el chico y él abrió la boca para dirigirse a mi:
- Hola, hemos visto que estás mirando los anuncios, ¿Te interesa alguno en especial?- me dijo amablemente.
- No... bueno, si, hay...
- ¿Tocas algún instrumento? - Me interrumpió ella intrigada.
- Sí, no toco muy a menudo, pero desde pequeña he tocado la guitarra eléctrica.
- Pues si usted desea, - dijo haciendo una reverencia cómicamente - bienvenida al grupo.
- Mary, habrá que hacerle alguna prueba, ¿no?
- Sí, claro. ¿Cómo te llamas? - me dijo la tal Mary.
- Scarlet.
- Bien, Scarlet pues si quieres cuando acaben las clases, ven al aula de música y te oiremos.
- Bale, gracias por la oportunidad, pero no he traído guitarra. - Dije un poco decepcionada.
- Tranquila, Scar, yo te dejaré la mía. - Me dijo él. Bueno... ¿pero qué les ha dado a todos con llamarme Scar? ¿No queda claro que así solo me llaman mis amigos? Grr... El chico me ponía un poco de los nervios,(como todos en general) se arrimaba demasiado y me sonreía mucho. La chica parecía notarlo, por que estaba un poco incómoda.
-Si, al final de las clases nos vemos. -Les dije, mirandola mas a ella que a él, mientras caminaba hacia las escaleras para dirigirme a mi clase, ya que la primera hora empezaría en breves.
Cuando llegué y tiré mi mochila encima de la mesa, recordé quién se sentaba a mi lado, y aunque intenté que eso me molestase con todas mis fuerzas no pude hacer mas que sonreír al pensar en las cosas que decía, que quisiera o no, me parecían divertidas. Me senté y fui sacando los libros cuando oí la silla a mi lado moverse, miré hacia arriba y lo vi a el, como no, sonriendo de oreja a oreja.
- ¿Que pasa, morena?- Dijo mientras se sentaba. Como no... la gente en este instituto debe de odiar mi nombre. Le dirigí una mueca de disgusto forzada y me centré en mis cosas como pude. Así transcurrieron las siguientes seis horas, excepto el recreo y la clase de informática donde nos movíamos de aula. Con él haciendo el payaso y yo fingiendo que me molestaba. Esperé impacientemente hasta que acabo la última clase y practicamente corrí hasta el aula de música, donde se suponía que iba a tener lugar la prueba para mi entrada al grupo. Por alguna razón eso me hacia mucha ilusión, el echo de ser parte de un grupo, ya era hora de que fuese haciendo un par de amigos, además la música era algo que me apasionaba, no podía vivir sin ella, porque al fin y al cabo era lo único que nunca me abandonaba, siempre estaba conmigo, fuese en la ducha o fuese en el coche... Cuando llegué, me pregunté si debería esperar fuera hasta que ellos viniesen o si podría entrar y mirar un poco las cosas. Decidí explorar y entré despacito, entraba suficiente luz por las ventanas así que no le dí al interruptor. Había pentagramas por todos lados, el aula estaba un poco desordenada para ser honestos, pero aun así se estaba a gusto, un par de guitarras aquí y allá y una batería imponente en el centro, también había un teclado y otro tipo de instrumentos más pequeños. Me acerqué a la guitarra y mas cercana y probé las cuerdas. Estaban perfectas, toqué un par de notas para calentar mientras les esperaba, cuando de repente oí una voz que me sobresalto.
- Esa también es mi favorita. -Dijo el chico que se me había acercado a la mañana. Venía solo esta vez. El hecho de que estuviese solo conmigo me molestaba un poco.
- Es preciosa.- Conteste con una sonrisa, sincera pero falsa a la vez, deseaba que Mary estuviese ahí en ese momento, pues me sentía un tanto incómoda. - Y tu novia? - Estalló en una carcajada.
- ¿Mary? Mary es mi hermana gemela... no lo has notado? Bueno, de hecho somos mellizos pero para el caso...- Oh, vaya, mellizos. Eso era nuevo. Volví a sonreír Y me quede mirando la otra guitarra.
-Bueno, ¿y la prueba?
-Lo de la prueba era una broma, solo hay que mirarte los dedos, se ve que eres una guitarrista nata. Pero si te va hacer sentir más cómoda puedes tocar algo y así ya lo hacemos oficial. - Se sentó en una silla que había cerca de mí y dijo- Soy todo oídos.
- ¿Solo vas a estar tú?
- Sí, adelante. -Sonrió para darme confianza. Pensé un par de segundos que tocar, y empecé a calentar un poco, toqué todas las notas para asegurarme de que todo estaba en orden y comencé con Nothing else mathers.  Escucho con atención hasta que acabe y me fije como abría los ojos cada vez mas. Cuando por fin acabé me dijo:
- Vaya, no me equivoqué contigo...- Parecía seriamente impresionado, me hizo sentirme cien por cien satisfecha conmigo misma.
- Y bueno... entonces, ¿qué hacéis?, ¿grabáis vuestras propias canciones?, ¿hacéis covers?, ¿cómo va?- Le interrogué, dando por asumido que ya estaba en el grupo.
- Bueno, tocamos un par de canciones de otros grupos, cuando a Dylan le da por componer algo probamos a ver como suena, pero todo es por diversión. Vimos que había grupos de todo tipo, desde las animadoras hasta el teatro, pasando por los de mates. Quedamos los lunes, miércoles y viernes a aquí mismo, a las 7 y intentamos mejorar, ayudarnos los unos a los otros, y a la vez divertirnos. Entonces, ¿qué te parece? ¿Entras? - Sonaba genial. Así me aseguraba de que seguiría tocando, y además me daba la oportunidad de divertirme y hacerme amiga de gente que juzgando por sus gustos y por lo simpático que era él, debían de ser de muy buen rollo.
- Claro, ¿por que no? - Le dediqué una sonrisa, no incomoda esta vez. Ya no me sentía mal a su alrededor, tenía una voz tranquila y suave que parecía acariciarte y tranquilizaba, además era un encanto. No como ese idiota de John. Que ostias haces pensando en el otra vez? Olvídalo idiota, y a este también, olvídalo.
- Bueno... - me dirigí titubeante hacia la puerta -  supongo que estaremos mañana entonces.
- A las siete, no te olvides.- Respondió mientras recogía unos papeles del suelo.
- No me olvido. -Dije mientras salía y sacudía la mano en un adiós apresurado. Salí del instituto satisfecha conmigo misma, y me fijé en que solo quedaba mi coche en el aparcamiento. Me pregunté como iría él, los segundos que estuve bacilante en la puerta fueron suficientes para que él me alcanzara.
- Vas andando?- Le pregunté, recordando que el instituto estaba un poco apartado.
- Sí, está solo a un par de kilometros, y me gusta caminar.
- ¿Quieres que te acerque? no me cuesta nada si me indicas por dónde.- Casi me sentí obligada a ofrecérselo, pero él no pareció notarlo.
- No, en serio, me gusta caminar.- Dijo con una sonrisa mientras se alejaba. - Hasta mañana, Scarlett.
- Hasta mañana.- Volví a sacudir la mano y me dirigí hacia mi coche que me acojió con una calidez embriagadora comparando con el frío que hacía fuera. En un instante vi como mi nuevo amigo se alejaba, y me vino a la cabeza su mirada, seguida de su sonrisa, un chico encantador, sí. No seas idiota, es un tío, especie prohibida en los próximos años... Bale, igual he exagerado, dejemoslo en especie prohibida por ahora... Me puse el cinturón y arranqué para dirigirme a casa, pero antes me pasaría por la biblioteca. Hacia semanas que no leía un buen libro.

2 comentarios:

  1. ¡Hola!
    Me he leído todos los capítulos que llevas y me han gustado mucho :) La verdad es que se te da bien escribir y si sigues así vas a tener futuro.
    Un beso, avísame si subes otro a mi blog :)

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  2. DIOS, NOTHING ELSE MATTERS, MUERO.
    Me está gustando mucho tu historia, seguiré leyendo los capítulos. Tienes algún fallejo (el "bale", por ejemplo), pero está muy interesante :)
    ¿Me avisas cuando subas nuevos capítulos? :D
    ¡Besos! ^^

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